
Has elegido una hermosa mañana de febrero para partir.
Donde el calor del sol abriga las gélidas almas que han quedado tras tu marcha, añorando prematuramente tus treinta y tres años de risas y alegrías.
No ha podido ser...no podías retrasarlo mas...y ¡ ganas no te han faltado!.
Has luchado por quedarte, como una jabata, pero...tu trabajo debe continuar en otro plano, dejando aquí la lección mas humana y de fuerza que debemos aprender.
Melani cariño, una legión de ángeles han venido a buscarte para que pises la alfombra roja del cielo, allí estarás deleitando con tu belleza a todos.
Te has llevado mucho amor contigo, y has dejado mucho amor aquí.
Hasta siempre...te abrazo el alma.